En la foto desde la izquierda: María Elena Maldonado, Robert Morales Vergara, Millie Cortés Quijano y monseñor Wilfredo Peña Moredo (padre Willie). (foto: Ángel M. Rivera Fontánez)
Celebramos el reconocimiento a personas valiosas, que son y hacen la diferencia en Puerto Rico. Nos sentimos orgullosos de que nuestra mentora Millie Cortés Quijano sea una de las homenajeadas con el Premio en el área de la prevención.
La premiación fue reseñada en Centros Sor Isolina Ferré, El Nuevo Día y en Primera Hora.
A continuación compartimos información con respecto a esta nominación:
Razón para la nominación:
Millie Cortés se destaca entre un grupo de mentores que sirven a jóvenes en alto riesgo social de la Comunidad de San Isidro en Canóvanas. Esta comunidad se caracteriza por sus altos índices de pobreza, violencia y marginación social. Esta mentora se distingue por su personalidad enérgica y comprometida. También por sus acciones en apoyo a su joven, que van más allá de lo que la organización Jóvenes de Puerto Rico en Riesgo ha definido como el compromiso de los/as mentores/as. Ser mentora de una joven implica haberse entrenado en un Modelo de Desarrollo Personal a través de talleres vivenciales, invertir largas horas de servicio voluntario, estar viviendo de tal manera que conmueva e inspire a los jóvenes a vivir una vida responsable y plena, continuar entrenándose mientras acompaña y apoya a su joven durante un período de nueve meses, estar dispuesta a escuchar sin juzgar y apoyar sin presionar, crear y mantener relación una con la familia de su joven, inventar formas creativas para apoyar a su joven aunque represente un reto, ver a su joven en su máxima posibilidad y apoyarla a ver opciones nuevas para una vida plena.
Referencia de Jóvenes de Puerto Rico en Riesgo:
Ante la posibilidad de nominar a una persona que ejemplifique los valores que caracterizan a la Hermana Isolina Ferré no podemos evitar un salto de ilusión en nuestro corazón ante la idea de que podamos exaltar a ciudadanos con una naturaleza y esencia tal, que al igual que Sor Isolina tiene la virtud de reconocer donde duele y sanar, ver soledad y crear simples actos que dicen todo.
El legado de la “Sister” se encuentra en la sabiduría de llenar los espacios que sólo algunos tienen la sensibilidad de ver y sólo un puñado tienen la valentía de actuar. De este puñado sale Millie Cortés Quijano, mujer que en su enérgico ser cuenta con el corazón de mil guerreros, y a su vez la suavidad necesaria para que como miel nos sintamos atraídos hacia ella.
Estas cualidades la hacen idónea para ser una herramienta en la obra de Dios. Mientras son tantos los llamados a cumplir con esta hermosa labor de amar al prójimo como a ti mismo, Millie lo aceptó con brazos abiertos. Reconozco la manera en que vive servir, sus acciones van dirigidas a que los que se han sentido faltos de amor, rechazados o en momentos sin aliento se sientan acompañados y amados.
Conocemos a Millie Cortés como voluntaria del Programa Jornada de Amor, dirigido por la Dra. Milagros González, y dedicado a brindar servicios de mentoría y apoyo sicosocial a jóvenes afectados e infectados por el VIH. Al Jornada de Amor cesar operaciones en el 2012, Millie se lanzó a una nueva jornada como mentora con nuestra organización, Jóvenes de Puerto Rico en Riesgo, simplemente así… sólo porque así son los siervos de Dios.
En la actualidad divide su tiempo como empleada de la compañía UPS, su familia y como mentora de una joven del barrio San Isidro de Canóvanas. Ser mentora implica acompañar al joven en actividades mensuales coordinadas por el programa. No obstante, durante el verano del 2015, Millie y su hermoso y alegre corazón se levantaba a tempranas horas de la mañana, desde su hogar en Bayamón partía hacia Canóvanas para buscar a su joven, llevarla a sus clases de verano para que de esta manera cumpliera con el compromiso de completar su meta a largo plazo; graduarse de 4to año. De esta madera es que está hecha Millie, compromiso aunque no es fácil, cómodo ni conveniente. Con este mismo ímpetu atiende a todo joven o persona que requiere apoyo.
Es un privilegio nominar a Millie Cortés Quijano para ser reconocida por su maestría en el arte de servir.
Lymaris Vázquez
Directora Ejecutiva
Referencia de Jornada de Amor:
El Premio a la Excelencia por Servicio al Próximo me parece una oportunidad maravillosa de exaltar la actitud de servicio y la entrega de Millie Cortés Quijano, que durante el tiempo de existencia de la organización Jornada de Amor formó parte y aportó de tres maneras diversas a la misma. Jornada de Amor estuvo dedicada por varios años a brindar servicios de apoyo y un modelo de desarrollo psicosocial para jóvenes infectados y afectados por el VIH. Los servicios estaban dirigidos a que los jóvenes, independientemente de su condición de salud, se percibieran como personas completas, valiosas y capaces de vivir saludable, responsable y productivamente.
En principio, Millie Cortés Quijano fue voluntaria de la organización. Entre las acciones movidas por su compromiso puedo mencionar que ella lideró los procesos de organizar actividades deportivas y recreativas prácticamente sin recursos. Millie demuestra maestría en hacer lo imposible, posible. Participó activamente en la iniciativa “Dale pon a la Esperanza” que consistía en brindar transportación a los jóvenes participantes que no pertenecían a las rutas cubiertas por la organización, para que pudieran asistir a sus talleres de desarrollo personal y actividades del programa. Fue mentora por dos años consecutivos por lo que dos jóvenes contaron con su acompañamiento y apoyo durante un año. Finalmente Millie pasó a formar parte de la Junta Directiva en la cual fue una gran aportación.
A Millie la mueve su compromiso por el país y por nuestra gente, es de esas mujeres que afirma “yo vine para quedarme”, incondicional, siempre dispuesta a ver cómo puede contribuir para hacer una diferencia, una mujer movida por un propósito de corazón.
En una ocasión, al preguntarle a Millie acerca de qué la motiva a ser mentora y vivir de esta manera, ella responde: “Brindar de mi tiempo y mis capacidades a los jóvenes en PR y en el proceso, desarrollarme. Vivo fascinada con el proyecto. La experiencia de mentoría es enriquecedora y me permite crecer y aportar. Sé que tengo un compromiso con mi país y mi gente y eso es solo una manera de cumplir con mi compromiso y mi propósito.
Dra. Milagros González